Compartir
No cabe duda de que el sector aduanero es uno de los sectores más dinámicos y pujantes de la economía paraguaya. Como la puerta de entrada y salida de mercaderías, la Aduana es nuestra puerta económica al mundo, por lo que debe ser cuidada celosamente de males como el contrabando y la corrupción para garantizar su óptimo aprovechamiento.
El pasado mes de abril, la aduana paraguaya registró una recaudación de Gs. 855.054 millones, una cifra inferior en un 4,8% respecto a los Gs. 898.483 millones del mismo mes del año pasado. Estas cifras dejan ver un movimiento importante por mes por parte del ente estatal, lo que deja en claro su importancia como recaudador.
El Estudio Aduanero Andrada Nogués señala tener como principal misión el brindar un servicio de despacho aduanero ágil, confiable y profesional con personal capacitado y eficiente además de tecnología avanzada para sus clientes. Como un fuerte conocedor del sector, Agustín Andrada Pasmor, director del estudio, nos habla sobre la relevancia de la Aduana en nuestra economía.
¿Qué papel juega actualmente el sector aduanero en nuestra economía?
Es uno de los ejes fundamentales en cuanto a la captación de los recursos financieros del país, su papel actual es primordial porque en ella se conjugan varios factores que podrían considerarse como importantes para todo lo que tiene que ver con el comercio internacional, sobre todo respecto al ingreso y a la salida de mercaderías.
En resumen, la aduana es elemental para la recaudación de impuestos, en ella se reúnen varios entes del Estado a través del sistema Sofía, que es la herramienta que hoy por hoy permite esa conexión entre instituciones. En lo que se refiere a la parte operativa, la entidad es la que debe poner las reglas para luchar contra males como el contrabando.
¿A qué nivel perjudica el contrabando en cuanto a pérdidas económicas a la aduana y al estado?
El contrabando es un mal que no solamente afecta a la Aduana desde el punto de vista de la recaudación, afecta a todo el país, porque no se logra llevar ese dinero que debería ser destinado a la educación, a la salud y a otros elementos fundamentales del gasto público de nuestro país.
Por otra parte, el contrabando perjudica a la salud en sí, ya que muchas veces los productos que entran de esta manera no tienen ningún tipo de control. Hay mercaderías que no han sido revisadas, que se encuentran con falta de calidad, y eso repercute en la gente; esta debería chequear las fechas de vencimiento y directamente no comprar productos de contrabando en la calle que son expuestos a la luz solar.
¿Cuál sería la raíz del constante ingreso de mercaderías de contrabando al país?
A parte de la falta de controles, está también la falta de educación de nuestra gente respecto al tema. Debido a la situación económica y los pocos ingresos, las personas piensan que comprando barato se están adquiriendo buenos productos. Hay que tratar de prevenir el contrabando por todas las vías posibles.
La cultura de comprar productos de contrabando, ¿Existe desde siempre o se ha instalado durante las últimas dos décadas?
Se ha ido instalando en los últimos 40 años más o menos, se debe, como dije, a la falta de educación y también a otros factores externos como la reducción de precios en los países limítrofes, la falta de control en las fronteras, etc.
¿La corrupción perjudica a la aduana al mismo nivel que el contrabando?
El nivel de corrupción que hay en la Aduana es el mismo que existe en todo el país, la corrupción no distingue edades, sexo, entes ni situaciones. Ella está enquistada en todos lados, el día que tengamos un compromiso real de cambiar y centrarnos en hacer bien las cosas, nos convertiremos en un país realmente poderoso.
¿Por qué hay una falta de control en la frontera tan marcada?
Hay muchos aspectos, uno podría ser el hecho de que les pagan bien a los que deberían controlar el paso de mercaderías para que no lo hagan, y el segundo sería la falta de elementos para trabajar en ese sentido. Existe una desidia en este último aspecto y yo creo que todo esto se debe a que estas prácticas ya están enquistadas entre las actividades normales.
