Uno de los requisitos para el desarrollo es la seguridad jurídica en materia de economía, ya que sin ella las inversiones no pueden consolidarse y las que ya se encuentran en el país se encuentran a la expectativa de poder retirarse rápidamente ante cualquier eventualidad. Beltrán Macchi, directivo de Visión Banco y Feprinco, opina sobre la importancia que debe tener la seguridad jurídica para el nuevo gobierno.
Mantener una seguridad jurídica para estabilizar o permitir el crecimiento en la economía de un país significa someter a todas las personas, empresas, industrias a las mismas reglas del juego, sin distinción de raza, credo, partido político, organización social, posición social, o etnia, etc.
Actualmente, Paraguay se encuentra gozando de un crecimiento en el área de inversiones extranjeras, por lo que la seguridad jurídica en la economía debe ser parte de la agenda del nuevo gobierno en pos de un mayor crecimiento económico local.
¿Cómo observa la situación macroeconómica del Paraguay?
Paraguay se desataca por su estabilidad macro y por su crecimiento superior a la media de Latinoamérica, aunque este último sea insuficiente para reducir la pobreza en forma significativa y visualizar nuestra inserción en el mundo desarrollada en el tiempo.
¿Cuál sería el posicionamiento económico del país en comparación a los países vecinos?
Aunque se buscó posicionar y hasta es válido destacar la baja carga impositiva, Paraguay debería ser reconocido por su mejor clima de negocios como país pequeño y abierto y además mediterráneo. La seguridad jurídica es fundamental para la inversión privada nacional y extranjera.
¿Qué implicará un nuevo gobierno para la economía nacional?
Creo que un nuevo gobierno trae expectativas de cambio y no me refiero a desconocer todo lo hecho como positivo por el anterior gobierno, sino a cambios positivos, reafirmando los logros del anterior gobierno y encarando aquellos desafíos que todos ya conocemos. Mejorar la infraestructura y conectividad y los servicios de educación, salud, vivienda y seguridad física. Esperamos apertura al diálogo para encarar las grandes transformaciones sociales y económicas y hasta políticas que necesitamos para nuestro desarrollo.
En términos de economía, ¿cuál debería ser el enfoque del nuevo gobierno?
El nuevo gobierno debe resolver un dilema que venimos arrastrando y que no está en la agenda tan claramente. ¿Hasta dónde el Estado debe incursionar en actividades que son propias de la empresa privada? Si seguimos con la línea trazada de impulsar empresas públicas que operan en ciertos sectores, como puertos, petróleo, energía, cemento etc., y además no ponemos foco en la calidad del gasto, es probable que nunca alcance la recaudación impositiva para atender las prioridades de la población y terminemos siendo tremendamente ineficientes. El gobierno debe concentrarse en dictar las reglas del juego en forma clara y asegurar la competencia, mas no incursionar en aventuras de impulsar empresas públicas que ya sabemos de antemano cómo terminarán.
¿Cómo se podría implementar políticas económicas y sociales que beneficien al país?
Para avanzar en las reformas político-sociales-económicas que necesitamos es necesaria una capacidad de relacionarse de los tres sectores, el gobierno, el sector privado y la sociedad civil. A partir de ahí será posible, en base al diálogo franco y sincero, acordar sobre nuestro futuro y avanzar en paz. El diálogo es la base para avanzar al desarrollo.
¿Qué se necesita para lograr una economía seria en Paraguay?
La seguridad jurídica y el respeto a las instituciones es responsabilidad de los tres poderes del Estado; debe ser un tema sagrado para los que están en la conducción de los mismos, pues no solo tiene un gran impacto en la inversión privada que genera el empleo y la riqueza, que permite al Estado recaudar para cumplir sus fines, sino que tiene un impacto tremendo en la calidad de vida de los ciudadanos, especialmente de los más humildes.
¿Cuáles son los beneficios que la seguridad jurídica puede brindar al empresariado paraguayo?
La reforma política es necesaria para asegurar la independencia de los poderes del Estado, por un lado, y para asegurar el acceso de los mejores a los puestos de conducción del mismo. Una eventual reforma constitucional deberá introducir cambios significativos en la organización del Estado prevista en la actual Constitución e introducir los cambios que aseguren un mejor funcionamiento del Estado. Los empresarios creemos que la parte dogmática de la actual Constitución no necesita cambios.
¿Cómo se puede establecer una mayor seguridad jurídica?
En Paraguay lastimosamente creemos que los cambios legales solucionan los problemas; sin embargo fracasamos en la implementación, pues no actuamos en base a planes concretos para introducir los cambios. Además, generalmente los problemas somos las personas y no las normas; el día que aseguremos que los mejores ocupen los cargos de dirección tendremos una democracia más sólida.