Emprender es un arte que continuamente se perfecciona. Más aún, teniendo en cuenta los continuos cambios coyunturales que aparecen, a los cuales los empresarios no quedan ajenos. Por eso, es importante escuchar los años de experiencia y aprendizajes quienes han recorrido con éxito el camino del emprendedurismo.
Rodrigo Weiberlen, CEO en ICON Industrias Creativas ON, recientemente lanzó el libro “Emprender mejor”. Conversamos con él para entender las actitudes que se involucran al momento de realizar un emprendimiento y las aptitudes para desarrollar proyectos de negocio exitosos.
¿Cuáles fueron sus objetivos al desarrollar el libro “Emprender mejor”?
El contexto actual nos demanda nuevas miradas y modelos en muchos ámbitos, tanto sociales, políticos, culturales y económicos. El emprendimiento no está fuera de esto y nos encontramos ante una oportunidad perfecta para repensar el modelo de empresas, pensando en cómo podrían ser las empresas del futuro, las más ágiles, las más sustentables, las más eficientes.
Este libro recoge más de 20 años de aprendizajes sobre el emprender, más experiencia de trabajo en distintas organizaciones de varios sectores y rubros, para poner a disposición de cualquier persona que tenga una idea, herramientas muchas veces técnicas, no accesibles y no localizadas en la realidad de la región.
El objetivo de este libro es democratizar estas herramientas y compartir buenas prácticas para un mejor emprendimiento, con más y mejor impacto positivo.
¿Qué aptitudes cree que son necesarias hoy para desarrollar un emprendimiento y hacerlo de manera exitosa?
Creo que se trata de un conjunto de aptitudes que se activan en distintos momentos del proceso de emprender. Pero algunas que me parecen valiosas serían:
1) la perseverancia, ya que el emprendimiento no es un camino fácil, sobre todo en los primeros años de desarrollo inicial del proyecto que es donde fracasan la mayoría de los mismos;
2) foco en lo que el proyecto necesita en ese momento de su desarrollo, para enfocar los escasos recursos y energías al lugar indicado;
3) flexibilidad y apertura al cambio con énfasis en crear una cultura de mejora continua, con mucha cercanía con el usuario.
¿Cree que con estas aptitudes basta, o qué peso tienen los factores externos, coyunturales, etc. al emprender? Y ¿piensa que hay una actitud que puede gestionar de manera eficaz estos desafíos, a veces multifactoriales?
Claramente hay factores coyunturales, pero los mismos se van allanando con los efectos de la globalización y la digitalización de procesos que hoy hacen que no sea estrictamente necesario operar en el mercado donde nace la idea, sino desde el lugar más conveniente para el proyecto.
En cuanto a las aptitudes, siento que estamos saliendo de una era donde se ve a las organizaciones como máquinas productivas para reconocerlas como sistemas orgánicos y vivos, insertos en un contexto mucho más cambiante y líquido.
Comprender los cambios evolutivos que emergen en la sociedad, la economía y los negocios es muy relevante para el emprendimiento. Las posibilidades de incorporarlos y potenciarlos en beneficio de los consumidores, clientes y usuarios dependerán de la capacidad cultural de adaptación del emprendedor. Necesitamos cambiar nuestra mentalidad, evolucionar en nuestro sistema de paradigmas.
¿Cuáles cree que son, en la actualidad, estos desafíos/los principales obstáculos que encuentran los emprendedores?
Cada emprendedor es único y su contexto también. Desde ahí, puede haber o no obstáculos de financiamiento, captación de talento, acceso a mercados. Pero, en líneas generales, creo que el mayor desafío está en atravesar el proceso de validación del proyecto o idea de negocio de manera eficiente sin quedarse en el camino.
A emprendedores iniciales, la validación de sus productos; a quienes ya cuentan con un producto validado el desafío es crecer. Para los grandes emprendimientos, posiblemente el desafío pasa por sostener y reinventarse.
Al hablar de emprendedurismo, muchos pueden pensar en empresas que comienzan. Pero el “espíritu emprendedor” también está presente en el liderazgo de quienes están al frente de empresas que ya llevan muchos años posicionadas. ¿Cuál es su opinión al respecto?
El emprender es transversal al hacer empresa, la cruza desde su origen hasta en su proceso de crecimiento, rediseño y cambio. Uno nunca deja de emprender ni siquiera cuando la organización está establecida, porque posiblemente a eso continúan procesos de cambios y mejoras continuas, como la creación de nuevos servicios o productos o unidades de negocio.
¿Un mensaje final que quiera dejar a los empresarios que leerán esta nota?
Los invito a leer el libro, que espero les aporte ideas para sus desafíos y emprendimientos. Hay muchos desafíos locales, pero a su vez oportunidades de negocios que pueden ser trabajadas desde las organizaciones.